Pasoslargos

Caminando y descubriendo nuestro pasado tirando de hilos llenos de colores


5. Mi decabuela Ana Crespo Ramos

Francisco Manuel Fernández Merino – 20 de enero de 2025

Un día como hoy, 20 de enero, pero de 1611, hace 414 años, nació en el pueblo de Fuencarral, una niña llamada Ana Crespo Ramos, otra de mis 512 decabuelas. Sus padres, Francisco y María estaban muy contentos. La familia Crespo Ramos Salcedo crecía.

La palabra Crespo se relaciona con las personas que tienen el pelo rizado u ondulado, aunque también se utilizó con las personas inteligentes y astutas, este uso repetido dio pie al apellido. El apellido Ramos es de origen español y tiene un significado muy interesante.

El apellido Ramos se refería a personas que viven cerca de un bosque o un lugar con muchos árboles. También podría hacer referencia a alguien que trabaja con la madera o que tiene habilidades en la carpintería.

Los primeros que llevaron el apellido Salcedo formaban parte de algunas familias de la nobleza Asturiana.

Cuando nació Ana la mortandad infantil era tremenda, que un embarazo llegara a término era una enorme satisfacción. No se paría en ningún hospital, se hacía en la casa, por lo que su madre María, que tenía en torno a 38 años, seguramente ya habría pasado por situaciones similares, pero sería ayudada por sus familiares más cercanas, ya que los riesgos eran muchos si algo no iba como debería ir un parto y la ayudarían a tomar decisiones en ese proceso.

Su padre, Francisco Crespo (onceavo abuelo), que nació en torno a 1575, también era de Fuencarral, era hijo de Juan Crespo, su abuelo paterno (doceavo abuelo).

Su madre, María Ramos de Salcedo (onceava abuelo), nació en mayo 1572, en Fuencarral, era hija de Juan Ramos (1545) y Constanza de Salcedo (que murió en 1603) y por lo tanto no vivía en este momento (doceavos abuelos).

Siguiendo con la historia de esta familia, mis onceavos abuelos Francisco y María se habían casado el 29 de mayo de 1600, algo más de 10 años antes del nacimiento.

Ana, su hija, tuvo 2 hermanas: Jerónima, la mayor, que nació en 1602 y María.

En estos años, la situación económica en España se vio agravada por la inflación, la devaluación del Vellón (moneda de menor valor) y la despoblación (expulsión de los moriscos en 1609), que debilitó a nuestra agricultura, lo que se sumaba a la continuada pérdida de influencia de nuestro país en el resto del mundo.

La población rural quedó muy afectada por las políticas fiscales y la crisis económica. Esto se añadía a la falta de agua en la zona y a épocas de sequía que endurecían la vida en estas zonas rurales de forma extrema. La pobreza, como en toda Castilla, les acompañó a lo largo de sus vidas.

Cuando tenía 4 años, murió su padre, un 9 de agosto de 1615, él tenía 40.

Cuando tenía 10 murió su madre, en 1621, con 48 años. Su hermana Jerónima, que en ese momento tenía 19, se casó el 8 de mayo de ese mismo año con Juan del Prado Ballecas, que tenía 26, ella tendría que llevar la casa y a sus 2 hermanas.

En 1629 nació Marcos, sobrino de Ana, que tenía ya 18 y más adelante nació su sobrina María.

Ana se casó en Fuencarral con Pedro de Esteban Rufel, mi decabuelo, vivieron juntos hasta que este murió el 15 de agosto de 1638, poco antes de culminarse la independencia de Portugal el 1 de diciembre de 1640, otra importante pérdida territorial de España. Una relación demasiado corta.

Se hacía muy complicado gobernar un país con un sistema de múltiples fueros y jurisdicciones locales, lo que impedía modernizar la gestión del Estado.

Tuvieron una hija: María de Esteban Crespo, que nació el 20 de noviembre de 1632, cuando su madre Ana tenía 21 años. María se emparejó con Joseph García de Guadalix (Son mis nonabuelos).

Juan del Prado, cuñado de Ana, murió en 1648, tenía 43 años. Fue el año en que se firmó la Paz de Wesfalia que puso fin a la guerra de los 30 años, que marcó el fin de España y del Sacro Imperio Romano como las mayores potencias europeas.

María de Esteban tuvo a su hijo Pablo García de Esteban en 1664, este se casó con Grazia de Asenjo Herranz (optabuelos). Fue el año en que las tropas británicas capturaron Nieiw (Nueva) Ámsterdam, a la que renombraron como New York.

Estos tuvieron a Pabla (Paula) García de Asenjo en 1694, que se emparejó con Alfonso (Alonso) Muñoz Herranz (heptabuelos).

Éstos tuvieron a Estefanía Bárbara Muñoz García, que se casó con Ángel Custodio Montero Gallego (hexabuelos), en este punto engarza este segundo hilo con el primer hilo que os mostré.

No me cabe duda de que esta familia nuclear de Ana Crespo vivió unos momentos terriblemente duros, llenos de desdichas, hambre y enfermedad, pero no es menos cierto de que afrontaron la vida con fuerza y energía, y que fueron resolviendo las dificultades sobrevenidas relativamente bien, sino, ¿cómo podría yo ahora contaros esta pequeña historia? Si a algunos de nosotros nos teletransportaran a esa época y a ese lugar, estoy seguro de que no duraríamos ni un telediario.

Evidentemente fueron vidas bastante cortas, el hilo familiar se pudo romper, pero … no lo hizo, “esa es la fortaleza de la lana de la que estamos hechos”.

Se que no conozco cómo era su vida cotidiana en esa época, por lo que el texto se queda un foco huérfano de contenido relevante, pero veo que cada vez se están digitalizando más documentos y textos de todas las épocas, y creo que con el tiempo podremos disponer de algunos de ellos y se podrá profundizar mucho más en cómo eran realmente esas vidas, por lo que este texto debe contemplarse como un primer borrador que debe servir de guía en el futuro para profundizar en el cómo esta familia nuclear Crespo-Ramos o Ramos-Crespo construyó su vida en común con sus hijos.



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